Sígueme en Twitter

martes, 14 de agosto de 2012

Tan Fácil



En efecto por que, claro, a veces uno piensa que, por ejemplo.
Las cosas que uno creen que hace, pero que no hace, como amanecer muerto por ejemplo,
Entonces uno se pregunta, claro…una pregunta weona: ¿cómo vas a amanecer muerto si no estas muerto ni vivo…?, uno se plantea interrogantes, entonces viene la duda que, obviamente, no tiene explicación. Claro, el espectáculo no es muy bonito ni agradable, pero si uno piensa para si: “¿cómo vas a amanecer muerto?”; entonces…la…este…yo…puta la weá… un proceso bioquimico disminuido morfológicamente a su mínima expresión, en tanto que el cuociente del seno del coseno del ángulo de 90 grados es igual a la suma de los catetos del triangulo rectángulo, que en total, suman 3.180. ¿3.180 qué? No sé.
Si sumamos todo esto a un tipo que se despierta muerto, como un cadáver que se murió y que yace cadavermente cual difunto, entonces, no puede ser, por que si te acuestas vivo, no puedes despertarte muerto.
Teóricamente uno puede despertarse muerto. O sea, no puede. Bueno…si, pero no.
Un fulano esta mañana se despertó muerto. El no se había dado cuenta.
¿Cómo vas a despertarte muerto? Es fácil la weaita:
porque estás vivo cuando te acuestas. Uno puede pensar, entonces que uno puede irse a la cama muerto y despertar vivo. Es lógico que uno no pueda irse a la cama muerto.
Esto no podría ser cierto, por que uno podría irse a la cama y no estar muerto y morirte, pero no estar en la cama y así es como uno se despierta muerto. Así, como quien se tira un peo.



No hay comentarios:

Publicar un comentario